Cuando la palabra “adaptarse” adquiere un significado diferente…
Hace un año, cuando no hablábamos de pandemia, de Covid, de mascarillas y pruebas PCR, la palabra adaptarse tenia otro significado, venia de la mano de flexibilidad, a día de hoy iría de la mano de lucha, reto, obstáculos, logros.
Adaptar(se): ‘Acomodar(se) o ajustar(se) a algo o a alguien, haciendo las modificaciones oportunas’:
«La inteligencia es la capacidad de adaptarse a circunstancias nuevas»
(Fdz Ordóñez España [Esp. 1980])
Y como seres inteligentes que somos, eso es lo que nos ha tocado hacer, adaptarnos, ya éramos un sector acostumbrado a los cambios, con los años los hemos ido sufriendo, nos hemos adaptado a las nuevas tecnologías, nos hemos ayudado de ellas y hemos ido mejorando paso a paso, pero nos llegó el reto más grande al que nos hemos tenido que enfrentar, adaptándonos a algo que no conocíamos y que nadie conocía, sin saber cuál era la forma correcta de actuar.
Todo empezó en el mes de marzo, justo hace un año, todo se paralizaba, implantaron el estado de alarma, nos confinaron,
solo podíamos salir para lo imprescindible, y de repente cambian nuestras prioridades, las mascarillas eran un bien imprescindible y estaban agotadas, también debíamos hacer uso del gel hidroalcohólico y productos de desinfección, todo se agotaba y era difícil de conseguir, pero debíamos conseguirlo, no solo a nivel personal, lo necesitábamos a gran escala, nuestro sector es esencial y no podíamos estar en casa, tenían que estar al pie del cañón, cuidando de las instalaciones de nuestros clientes, en ocasiones estaban solos en lugares cerrados por la pandemias, en otros casos estaban en medio de esa lucha en lugares de primera fila, nos teníamos que adaptar, necesitábamos esas EPIS.
Mientras llegaba la siguiente adaptación, pues empezamos a tener consciencia que esto duraría un tiempo, nos decían que debíamos fomentar el teletrabajo, minimizar las reuniones, y el contacto, en poco tiempo todos éramos expertos en programas de videollamadas, el único medio para poder acercarnos a los clientes, a los compañeros, para poder seguir con ese contacto humano y cercano que tanto nos gusta, las videollamadas han dejado de ser frías, para acercarnos cuando todos teníamos los mismo problemas.
Y cuando pensábamos que lo teníamos todo controlado, después de mucho luchar los trabajadores tenían sus EPIS, el contacto con los compañeros y clientes estaba controlado, teníamos todo encaminado, toca dar un paso más… se reanudan los eventos deportivos, y con ellos los nuevos protocolos, serían unos eventos sin público y los participantes se reducían lo máximo posible, solo lo esencial y para garantizar su seguridad y la nuestra, nos adaptamos a los nuevos protocolos basados en los reglamentos sanitarios, las instalaciones se dividieron en colores, todos ellos marcaban nuevos protocolos y para acceder a ellos ya no necesitabas un pase, necesitabas toma de temperatura y un código QR o código de barras vinculado a una PCR Negativa. Si lo vemos por televisión, una carrera de F1 o Moto GP continúa siendo igual, un partido de futbol continúa teniendo sus veintidós jugadores en el campo, el básquet continúa iniciando con un salto, pero cuando estás ahí, el ambiente no es el mismo, no hay sonido, no hay risas, no hay bares ni tiendas de merchandising.
Un año de cambios.
Ha sido un año de adaptarnos, tanto en lo personal como en lo profesional, hemos salido adelante y seguimos luchando, demostrando que estamos al pie del cañón. Que la seguridad es importante, que nunca duerme ni se queda atrás, que estamos para todo, siempre preparados y listos para adaptarnos.
Si una cosa me ha enseñado este año es que unidos somos mas fuertes y fuertes vencemos.
Este artículo ha sido publicado en la revista ADSI (asociación de Directores de Seguridad Integral en su número 472 correspondiente a Marzo de 2021
Entrada publicada por Sabico Seguridad, , el 31/03/2021 a las 17:46